Antes de realizar cualquier compra, asegúrate de que la dirección web (URL) sea la correcta. Nuestra única tienda oficial es:
No utilizamos extensiones como .es, .net, .org u otras variantes. Los estafadores a menudo crean sitios web similares para engañar a los clientes. Además, comprueba que la URL comienza con "https://" y que aparece un candado en la barra de direcciones, lo que indica una conexión segura.
Una tienda online confiable debe proporcionar información de contacto clara, como dirección física, número de teléfono y correo electrónico. También debe incluir un aviso legal y políticas de privacidad. Esto demuestra transparencia y compromiso con las normativas vigentes.
Investiga lo que otros clientes dicen sobre la tienda. Las opiniones y reseñas pueden darte una idea de la calidad del servicio y la confiabilidad del vendedor. Busca comentarios en sitios independientes y foros de discusión.
Verifica que la página web tenga un certificado de seguridad SSL. Esto se indica con un candado en la barra de direcciones y con el prefijo "https://" en lugar de "http://". Este certificado garantiza que tus datos están protegidos. Además, evita realizar compras desde redes Wi-Fi públicas, ya que pueden ser inseguras.
Una tienda seria debe tener políticas claras sobre el manejo de datos personales y procedimientos de devolución o cambios de productos. Lee detenidamente estas políticas para conocer tus derechos como consumidor.
Si una oferta parece demasiado buena para ser verdad, probablemente lo sea. Los precios excesivamente bajos pueden ser una señal de alerta sobre la autenticidad del sitio o la calidad de los productos. Los estafadores suelen atraer a los compradores con descuentos irrealistas.
Opta por métodos de pago que ofrezcan protección al comprador, como tarjetas de crédito o plataformas de pago reconocidas (por ejemplo, PayPal). Evita transferencias bancarias directas o pagos en efectivo. Nunca envíes dinero a cuentas en el extranjero si no estás seguro de la legitimidad de la tienda.
Asegúrate de que tu ordenador, tablet o móvil tenga un antivirus actualizado. Esto te protegerá contra posibles malware o phishing que puedan comprometer tu información. Además, mantén actualizado el sistema operativo y las aplicaciones para evitar vulnerabilidades.
Durante el proceso de compra, solo proporciona la información esencial. Datos como tu número de seguridad social, contraseñas personales o números PIN nunca deben ser solicitados. Sé cauteloso con los correos electrónicos o mensajes que te pidan información personal o financiera.
Si algo no te parece correcto o tienes dudas sobre la legitimidad de una tienda, es mejor buscar alternativas. Tu seguridad es lo primero. Si sospechas de un sitio fraudulento, puedes denunciarlo a las autoridades competentes, como la Policía Nacional, para ayudar a proteger a otros consumidores.